Poco a poco vienen las despedidas. Ya no tanto de gente, sino de lugares.
Os escribo desde los ordenadores de la facultad, desde donde he pasado tantas horas muertas esperando a que los experimentos reaccionaran completamente. Todavía no me creo que me quede aqui una sola noche. Una sola noche en esa cama en la que el primer día casi me rompo la espalda. Qué cosas! En el laboratorio ya he recogido todo: bata, resultados, material...creo que los experimentos los dejaré aquí, más que nada por el qué dirán en el aeropuerto. Ahora ya sólo queda trabajar en España y terminar la memoria...que ganas...
Como muchos ya sabréis, esta última semana se está pasando con compañía. Y menos mal, porque si no hubiese sido bastante triste. El jueves fuimos a Tallin, en mi caso por sexta vez. Si alguna vez queréis vais, ya sabéis, aquí el menda mejor que la ofi de turismo.
También me "despedí" de las dos islas de Helsinki (Suomelinna y Seurasaari). Por cierto, bastante bonitas en verano, con mogollón de vegetación y demás.
Tampoco me quiero poner meloso con eso de que esto se acaba y blablabla. Por contra si os digo: en unas 32h me tenéis allí. Así que los que creiais que que me habiais perdido de vista, lo siento por vosotros.
No sé si esto es la despedida del blog. Es posible. Tengo una nueva entrada en mente como despedida, pero ya veremos si finalmente sale. Aún así, próximo destino USA. Imagino que se hará un nuevo blog, además con más ayuda, con lo que lo mismo estamos cada día escribiendo...ya se verá.
Seguid en contacto con este blog, que seguramente se publicará la nueva dirección aquí.
Ha sido un placer ir contando batallitas desde Helsinki. Gracias a los lectores asiduos, a los que dejáis comentarios y a los que no (aunque estos últimos os podiais haber estirado un poquillo) y perdón por los largos períodos sin escribir.
Sed buenos!
lunes, 16 de junio de 2008
lunes, 2 de junio de 2008
A grandes problemas, cutres soluciones
Como os podeis imaginar, el aislamiento aqui es muy bueno, y de ahi que las ventanas sean de triple cristal, pero tienen un inconveniente: las grandes no tienen picaporte. Lo que implica que al llegar el verano pues no puedes abrirlas, a no ser que te compres un picaporte. Yo por fin lo he conseguido, y ya he podido disfrutar del vientecillo entrando en la habitación.
El problema es que para abrir la ventana que da a la habitacion (la de las "persianas") hay que quitar la mesa, por lo que la tengo que dejar abierta hasta que me vaya. La otra ventana abre y cierra perfectamente (quitando los problemas de encaje). Pero ésta no tiene persianas, y la luz que entra es bastante considerable, por lo que he tenido que hacer mi propio apaño. Aqui lo tenéis:
Si os fijáis he dejado una parta abatible por si algún día hace más frío y así poder dejar entrar la luz sin necesidad de abrir la ventana. Lo que hay que hacer por poder descansar...
El problema es que para abrir la ventana que da a la habitacion (la de las "persianas") hay que quitar la mesa, por lo que la tengo que dejar abierta hasta que me vaya. La otra ventana abre y cierra perfectamente (quitando los problemas de encaje). Pero ésta no tiene persianas, y la luz que entra es bastante considerable, por lo que he tenido que hacer mi propio apaño. Aqui lo tenéis:
Si os fijáis he dejado una parta abatible por si algún día hace más frío y así poder dejar entrar la luz sin necesidad de abrir la ventana. Lo que hay que hacer por poder descansar...
domingo, 1 de junio de 2008
Últimos días
Esto está ya casi finiquitado. Y afortunadamente tengo la sensación de que todo lo que tenía que hacer está hecho (hablando de vivencias, lo exámenes están a la espera), con lo que me voy con la conciencia tranquila de haber aprovechado uno de los años más intensos de mi vida.
La gente se ha ido ya (a excepción de Carlos, que le tengo de okupa en casa). La residencia, donde tantas fiestas se han hecho, ha pasado a ser durante el verano un hostal. Ayer entraban nuevos inquilinos, con un perfil completamente diferente claro. Se veian hasta niños por ahi. Había personal de limpieza por los pasillos, y las habitaciones quedaban vacías y tristes. En cuanto a las despedidas: cansado de ellas. Porque las hay cada dos días, lo que implica que cada dos días tienes que decir adiós a alguien con el que has convivido un año, y al que verás dentro de Dios sabe cuánto.
Aqui en casa ya sólo quedamos Miguel y yo. El alemán, siendo consecuente con su rara personalidad, ni se despidió aun sabiendo que yo estaba en casa...
Este finde ha sido prácticamente el último como erasmus. A partir del Martes soy el único que quedará de mi grupo de amigos. Es posible que me anime a salir con Miguel algún día, pero ya veremos. Y el Martes 10 vienes tú: PRIMO! jeje. Creo que la vida "nocturna" (con comillas porque apenas es de noche) no será nuestro fuerte, jeje. Pero bueno, aprovecharemos las mañanas para conocer Helsinki y alrededores.
La gente se ha ido ya (a excepción de Carlos, que le tengo de okupa en casa). La residencia, donde tantas fiestas se han hecho, ha pasado a ser durante el verano un hostal. Ayer entraban nuevos inquilinos, con un perfil completamente diferente claro. Se veian hasta niños por ahi. Había personal de limpieza por los pasillos, y las habitaciones quedaban vacías y tristes. En cuanto a las despedidas: cansado de ellas. Porque las hay cada dos días, lo que implica que cada dos días tienes que decir adiós a alguien con el que has convivido un año, y al que verás dentro de Dios sabe cuánto.
Aqui en casa ya sólo quedamos Miguel y yo. El alemán, siendo consecuente con su rara personalidad, ni se despidió aun sabiendo que yo estaba en casa...
Este finde ha sido prácticamente el último como erasmus. A partir del Martes soy el único que quedará de mi grupo de amigos. Es posible que me anime a salir con Miguel algún día, pero ya veremos. Y el Martes 10 vienes tú: PRIMO! jeje. Creo que la vida "nocturna" (con comillas porque apenas es de noche) no será nuestro fuerte, jeje. Pero bueno, aprovecharemos las mañanas para conocer Helsinki y alrededores.
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